La REACC sigue adelante impulsando cultura comunitaria y trabajando por hacerla más digna y sostenible

Con el Castillo de San Servando en Toledo como sede, la Red de Espacios y Agentes de la Cultura Comunitaria (REACC), vivió su primer encuentro presencial tras casi dos años desde su formación en 2020, en plena pandemia. Un total de 43 personas que viajaron desde toda España y se reunieron durante 2 jornadas para debatir, proponer, reflexionar, decidir… y disfrutar!

Fruto de las propuestas y conclusiones de esta Asamblea, las acciones de la REACC al mediano plazo se orientarán, entre otras, a trabajar una propuesta para el Estatuto del Trabajador/a Cultural; también fomentar las redes y la descentralización de la cultura comunitaria; y reivindicar el uso de los espacios públicos.

Marzo 2022.- “Intensa”, “enérgica”, “comprometida” y sobre todo “inspiradora”, son los conceptos que se repiten para referirse a esta red entre quienes asistieron y que vuelven a sus casas con la tarea de seguir fortaleciendo y expandiendo la REACC en sus territorios.

Desde Galicia, País Vasco, pasando por Asturias, Catalunya, Murcia, Andalucía, Extremadura, Aragón y Madrid; colectivos de toda España se encontraron en esta asamblea, gestada como un espacio de reflexión, cuidado, acción y celebración.

¿QUÉ ENTENDEMOS POR CULTURA COMUNITARIA?

Desde su fundación, la REACC definió cultura comunitaria como «cualquier práctica artística que, en un mismo proyecto o actividad, involucra a agentes y a comunidades en procesos creativos de carácter colaborativo y transformador». Se trata de prácticas, tradiciones, procesos, creaciones y transformaciones que conciben la creación, mediación y participación artística como parte de las comunidades en las que se inscriben.

La REACC es una red que constituye una asamblea de diálogo, apoyo mutuo y acción entre profesionales de las artes y la cultura comunitaria española, que nació en pleno confinamiento con cuatro objetivos principales: alimentar los vínculos; crear sinergias; salvaguardar proyectos comunitarios; visibilizar la cultura comunitaria e intentar dar respuestas a las problemáticas endémicas que la debilitan. Grandes desafíos que fueron puestos sobre la mesa en este encuentro para definir y evaluar alrededor de las preguntas ¿dónde estamos? ¿qué hacemos y en que condiciones e (im)posibilidades? ¿cómo nos sostenemos económica y afectivamente? ¿cómo nos planteamos a futuro?

UN DIAGNÓSTICO QUE EXPANDA NUESTROS HORIZONTES

La Asamblea inició el sábado 25 a las 10 de la mañana con una bienvenida de Teo García, Concejal de Cultura, y Sergio Nombela, Jefe de Servicio de Juventud de la Consejería de Cultura de Toledo. Uno de los puntos fuertes del programa fue la puesta en común del Primer estudio de la Red de Espacios y Agentes de la Cultura Comunitaria. Delineando horizontes comunes para el arte y la vida en España, elaborado por el grupo de trabajo interno llamado “nodo diagnóstico”.

El informe, que intenta hacer una fotografía fija del dinámico ecosistema de la cultura comunitaria, hace especial hincapié en las formas y actividades principales de cada agente/colectivo, su ámbito de acción y su sostenibilidad; intentando abarcar y reflejar las tres áreas de actuación de la REACC; la práctica artística, la acción cultural y la investigación-acción, atravesadas por tres dinámicas que nos definen: el pensamiento crítico, la autorganización y la acción colectiva. Los resultados de este diagnóstico serán compartidos prontamente.

Por la tarde del sábado, como un gran enjambre en movimiento, bajamos al centro de Toledo para leer a coro el Manifiesto Pro Cultura Comunitaria.

PRINCIPALES CONCLUSIONES

Finalmente, el domingo 27 de febrero, se presentaron informes de dos de los proyectos ejecutados durante 2021 por la REACC: la Anticonvocatoria y Tándem, se sellaron acuerdos y se identificaron las principales conclusiones de la Asamblea. En este sentido, emerge con claridad una alta capacidad de movilización y transformación social de lxs colectivos y agentes participantes, pero también un alto nivel de precarización; por ello las estrategias que delinearán las acciones futuras son:

Continuar completando este mapa de la cultura comunitaria a través de un diagnóstico continuado en el tiempo que integre cada vez más realidades y territorios y favorezca análisis comparados a través de los años; promover la capilaridad de la cultura comunitaria, compartiendo las fortalezas y las colaboraciones sinérgicas de cada iniciativa;
Potenciar el activismo artístico y cultural para la transformación social, impulsando a través de REACC, acciones movilizadoras y colectivas que promuevan el trabajo comunitario como vía de encuentro social; trabajar por la mejora de las condiciones laborales y de vida de los agentes de la cultura comunitaria, instaurando marcos de colaboración concretos con las administraciones públicas implicadas que contemplen, entre otros, la cesión de espacios municipales y demandando la responsabilidad constitucional de garantizar una cultura viva y accesible. En este sentido, la REACC ya fue contactada por el Ministerio de Cultura y Deporte para que presente una propuesta ante la Comisión Interministerial para el Estatuto del Artista.
Y finalmente; fomentar la accesibilidad y la descentralización de la cultura comunitaria. Para ello, la Red debe hacer un esfuerzo consciente de tender puentes y comunicación con agentes que viven y trabajan en el campo, entendiendo que toda economía social y solidaria que desarrolla su actividad en el entorno rural son aliados esenciales para insistir en la descentralización de la cultura comunitaria en los territorios.